Experimentar o morir.

Hay valores, como la estabilidad que salieron de la física para instalarse en la bioquímica y de ahí han dado el salto a un cierto tipo de «filiosofias» y «fobiosofias» (me acabo de inventar estas dos palabras, espero me permitan la licencia de esta incontrolable costumbre) en las que basan sus mantras fidelizadores casi todos los estados.

Esta estructura narrativa, relatos los llaman ahora los profesionales del sector, en la que en el nombre de un centro idílico que ansia tranquilidad y prosperidad se define, a todo lo que no provenga de quienes dominan ese discurso, como una gran amenaza el riesgo inherente a cualquier cambio y éste se interpreta como la más, estúpida, interesada y atroz, acción suicida.

Puestos en esta tóxica tesitura vuelvo sobre el titular de esta parrafada, si hemos llegado a nuestro nivel técnico a base de experimentos ¿qué nos hace pensar que vamos a progresar como sociedad de algún modo sin predisposición a los cambios inherentes en cualquier proceso evolutivo?

Bueno y como la cosa va de experimentos ahí os dejo mis últimos experimentos con un lápiz digital que me han regalado. No lo controlo mucho y no se si lo acabaré controlando pero ahí ando, hasta la próxima.